Toda una declaración de intenciones

En el diario Montañés encontrabamos hoy la siguiente tribuna del secretario General del PSOE en Torrelavega:

Los rumores ya circulaban el jueves día 12 a la hora de comer: «El consejero de Industria, Javier del Olmo, dimitirá por la tarde, con toda seguridad». Los interrogantes se sucedían: ¿Por qué? ¿Cómo? ¿Quién le sucederá? ¿Qué va a suceder con todos los asuntos pendientes relativos Torrelavega, que del Olmo arrumbó en los sótanos de la indolencia? ¿Será voluntad del sucesor retomarlos con la presteza que nunca debieron perder? Aún rumiando estos asuntos, la foto se completó con algún otro tema pendiente de otras consejerías a los que se les podría aplicar el viejo dicho de «¿qué hay de lo mío?»

Hasta ahora, «de lo mío», de lo comprometido desde la Consejería de Industria y desde alguna otra cosa, poco o nada. En los últimos años, el trabajo en los despachos de Peña Herbosa ha sido intenso, pero las reuniones han resultado tan cuajadas de buena voluntad como poco fructíferas en resultados palpables. Los socialistas de Torrelavega somos muy tenaces, y lo somos mucho más cuando la reivindicación recae sobre compañeros de partido, ya que suele venir vestida con compromisos compartidos. Además, los socialistas de la segunda ciudad de Cantabria -en tamaño y población- tenemos el deber y la responsabilidad de exigirle al Gobierno regional lo que los torrelaveguenses merecen, y la ciudad demanda.

Torrelavega tiene un listado de proyectos y necesidades inaplazables por más tiempo, cuya postergación sería, llegados a este punto, injustificable. Tras los últimos malos resultados electorales, el Partido Socialista de Cantabria no anda sobrado de municipios con alcaldes o alcaldesas socialistas. De entre los que nos quedan, sin duda, es Torrelavega el más significado por dimensión, por tradición progresista y por votos emitidos favorables al PSOE.

Con esta verdad incuestionable cabe preguntarse qué horizonte se abre ante la capital del Besaya cara a la segunda mitad de legislatura. Los proyectos inaplazables e irrenunciables que los socialistas en el gobierno municipal seguiremos planteando al gobierno cántabro, en la calle Peña Herbosa los conocen muy bien desde hace tiempo. Pero los torrelaveguenses tienen el derecho a conocer de primera mano los principales asuntos pendientes con su ciudad, los cuales paso a enumerar:

El primero es el impulso y la agilización al máximo -de una vez por todas- de la tramitación del soterramiento de las vías de FEVE a su paso por la ciudad.

Los socialistas de Torrelavega exigimos que se haga de este asunto y de la construcción de la Estación Intermodal de La Carmencita una prioridad que el nuevo consejero de industria, el compañero Juanjo Sota, debe abordar, casi, como si fuese su único cometido en lo que resta de legislatura. Los socialistas de Torrelavega exigiremos, como hemos venido haciendo insistentemente, que la Consejería de Industria tutele y coordine un exhaustivo control de las mercancías peligrosas en la estación- y decimos estación, no apartadero- de Tanos, para que a ningún vecino le quede el más mínimo resquicio de duda acerca de si se está cumpliendo lo pactado con la empresa concesionaria del transporte y con las receptoras de las materias.

De igual modo, nuestra tozudez no permitirá que desistamos en reclamar la imprescindible colaboración para la puesta en marcha del Transporte Urbano en la ciudad y un esfuerzo por comercializar al cien por cien las parcelas que quedan por vender en el Parque Empresarial Tanos-Viérnoles, -naves nido incluidas- con la misma voluntad que en áreas industriales de municipios adyacentes.

El anterior consejero hizo caso omiso sobre la urgencia necesaria para activar estas cuestiones; otros tienen grandes retos, y para muestra un botón: la Feria de Muestras de Cantabria en Torrelavega, que debe ser atendida sin más demoras. Esperemos que el compañero Juanjo Sota luzca una mayor diligencia que otros que ocupan los sillones del Consejo de Gobierno. Éste es un buen momento para retomar estas actuaciones, de gran calado y de perentoria ejecución para Torrelavega. No lo olvidemos, que puede ser la segunda ciudad en las estadísticas, pero es la primera en importancia para casi 60.000 torrelaveguenses, y desde luego, aunque algunos lo ignoren, la primera en importancia estratégica para el Partido Socialista Obrero Español en Cantabria.

Tengámoslo presente, sobre todo, en los despachos.